Hemos sido mencionados en este artículo del diario «El Mundo».
Sólidos que se vuelven blandos al comprimirse o moléculas tubulares son algunos de los avances del congreso NanoSpain
San Sebastián se ha reducido durante unos días a una escala más pequeña con motivo de la decimocuarta edición del congreso NanoSpain. Un evento llamado a abordar los avances de la nanotecnología en el territorio español. En investigación básica, sí, pero también versó sobre los desarrollos que las empresas están llevando al mercado.
Uno de los lanzamientos que destaca el profesor Juan José Sáenz, investigador en el Donostia International Physics Center y miembro del comité organizador del congreso, toma como punto de partida una rama basada en las simulaciones por ordenador. Si bien antes se utilizaban para comprender las características de moléculas, los sólidos y los materiales, ahora sirven directamente para diseñarlos. «Es posible escoger las propiedades que se desean conferir a las moléculas utilizando el ordenador», comenta.
Una mejora cada vez más implantada en las farmacéuticas. En esta línea, Federico Marchesin presentó los últimos avances incorporados al software que comercializa la compañía Simune Atomistic que diseña materiales para diferentes aplicaciones desde catálisis, almacenamiento de energía o creación de fármacos.
Otra de las protagonistas fue la presentación de moléculas diseñadas con formas específicas, como de estrella o de tubo, según comenta el propio Sáenz. «La manera en que, de alguna manera, crecen las partículas crea esta estructura por sí misma».
Las aplicaciones que se pueden encontrar en el mercado pasan por materiales nanoestructurados como las presentadas por Marta Brizuela, del centro tecnológico vasco Tecnalia, con una solución que se aplica en el recubrimiento de objetos como los antirreflectantes para gafas y otro tipo de cristales, como parabrisas para evitar los brillos.
Otra de los desarrollos presentes era la nanotecnología en la fabricación de lubricantes. Un producto que, en todo caso, se utiliza para evitar que exista fricción entre las piezas de la maquinaria.
Más conocidas son las características hidrófobas aplicables a la nanoescala. La compañía navarra Tecnan desarrolla recubrimientos para aplicar sobre materiales como los neumáticos o la piedra y que evitan que las gotas se adhieran. Por contra, éstas resbalan por las superficies: «Son materiales bioinspirados», dice Sáenz.
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fuente: Diario el mundo
link: http://www.elmundo.es/economia/2017/03/13/58c66a0522601d1d478b4621.html
